Desde hace tiempos remotos en los entornos de gestión hemos aceptado que no hay tiempo para probar, que si hay que restar días a la planificación se quita de las pruebas, hasta tal punto que nos hemos resignado a que se lleven a cabo pruebas en condiciones o no. Eso añadido a que el sector ve más negocio en mantener y reparar que en hacer productos con calidad.
Esta paradójica, pero real solución nos lleva a quejarnos continuamente y echar culpas al negocio, al usuario sin darnos cuenta que a lo mejor tenemos por un lado problemas de ética en nuestras direcciones o problemas de comportamiento y actitud en nosotros mismos para resolver la situación de una vez por todas.
Por eso quiero hablar del peopleware y de sencillas técnicas que pueden sacarnos de apuros en estas situaciones que he comentado y que seguro habéis vivido.